Personaliza tu Team Foundation Server
Existen muchas formas de personalizar TFS para que se adapte a nuestras necesidades. Nuestro artículo explora unas cuantas formas de hacerlo.

“Cada maestrillo tiene su librillo”. Esta célebre frase proverbial nos recuerda que la efectividad se puede alcanzar de diversas formas, y que nos corresponde a cada uno de nosotros encontrar la manera óptima de realizar nuestras tareas. En suma, somos nosotros mismos los que debemos hallar nuestra propia manera de obtener eficacia. El equipo que ha creado Team Foundation Server sabe muy bien que cada equipo de desarrollo realizará el proyecto de una forma particular, respondiendo a necesidades propias y siguiendo metodologías que, aunque partan de una base común, será recomendable adaptar a cada escenario.
Muchas de las empresas que implementan Team Foundation Server se conforman con utilizar las características incluidas en él sin realizar ninguna modificación, pero TFS es un producto extraordinariamente versátil que admite múltiples formas de configuración y personalización. La mayor parte de las personalizaciones no requieren gran esfuerzo y permiten sacarle mucho más partido al conjunto de herramientas que componen TFS, ya sea introduciendo en las metodologías información personalizada sobre la metodología de nuestro equipo o sobre nuestro proceso de desarrollo, o extrayendo información más exhaustiva sobre el mismo.
En esta nota os vamos a dar algunas pinceladas sobre tres de los elementos que podéis personalizar en vuestras implantaciones de TFS, a saber: las plantillas de proyecto, los informes de Reporting Services y los portales de colaboración de SharePoint. No obstante, existen muchos más elementos personalizables en TFS y además es necesario recordar que por supuesto existe un API que os permitirá acceder mediante aplicaciones a las caraterísticas del producto… pero eso ya es otra historia.
Personalización de plantillas con TFS Power Tools
Si algo me esfuerzo en recomendar a los equipos que implementan TFS es que inmediatamente tras la instalación del producto instalen las TFS Power Tools, tanto en el servidor como en los equipos cliente. Las Power Tools son un conjunto de herramientas creadas por el equipo de TFS de Microsoft destinadas a ampliar la capacidad del producto y a mejorar su productividad. Entre las características reseñables están la posibilidad de crear copias de seguridad de las instalaciones, o realizar un análisis de la instalación para detectar errores o malas prácticas, y también la posibilidad de acceder al control de versiones desde el explorador de Windows, sin necesidad de abrir Visual Studio.
Pero la característica que nos interesa es el editor de plantillas de proyecto. Los proyectos de TFS se crean a partir de plantillas que en realidad son simplemente un conjunto de archivos XML que definen todos los aspectos de nuestros proyectos, desde la definición de los elementos de trabajo hasta la estructura de carpetas del repositorio de Reporting Services o los documentos por defecto que se crearán en el portal de SharePoint. Sin embargo, como os podéis imaginar tocar a mano esos ficheros XML puede resultar farragoso y conducir a error, de modo que mediante el editor de plantillas de TFS podemos configurar todos esos aspectos de una forma fácil e intuitiva. Si bien teóricamente podríamos crear una plantilla de proyecto desde cero, lo recomendable es que os bajéis de vuestro propio servidor alguna de las plantillas ya existentes (la de Scrum, por ejemplo), la copiéis en algún directorio local y modifiquéis la copia. Una vez realizados los cambios podéis subirla a vuestro servidor, a alguna colección de proyectos concreta (el ámbito de la plantillas se limita a la colección de proyectos en la que residen) y a partir de ese momento podréis crear nuevos proyectos personalizados con la plantilla que hayáis modificado.
Mediante la plantilla de proyectos podéis modificar todos los aspectos del proyecto: las áreas e iteraciones por defecto, las plantillas de laboratorios, las características del control de versiones o incluso los grupos de seguridad y los permisos asignados a los mismos. Sin embargo el punto en que el editor de procesos de las Power Tools se demuestra más útil es en la modificación y personalización de los elementos de trabajo. Mediante esta herramienta podremos añadir o modificar los campos de los elementos de trabajo, ajustándolos a nuestras necesidades, añadiendo campos que nos hagan falta e incluso modificando el flujo de estado de los elementos de trabajo. Podemos, por ejemplo, añadir varios tipos de Error, o crear elementos de trabajo completamente desde cero. No obstante, es recomendable c rearlos a partir de algún elemento de trabajo existente y luego realizar modificaciones.
Una pregunta recurrente es: ¿puedo modificar elementos de trabajo de un proyecto ya creado? La respuesta es que sí, que es posible, pero debéis andar con ojo porque hay que recordar que esos elementos de trabajo ya tendrán información asociada. Procurad no eliminar campos, tan solo ocultarlos de la plantilla de edición, y procurad también no añadir campos que sean obligatorios para que no haya colisiones con los elementos de trabajo ya creados.
La modificación de los elementos de trabajo no sólo os permitirá personalizar vuestros entornos de ALM, sino que además proporcionará a vuestro equipo las herramientas que necesiten para la gestión sin tener que recurrir a herramientas externas, como ficheros Word o Excel, para incluir información complementaria. Si creáis plantillas consistentes la generación de nuevos proyectos ya incorporará estas personalizaciones y lograréis crear entornos de desarrollo más coherentes y eficaces para vuestros equipos.
Personalización de informes y portales de colaboración
Si la personalización de elementos de trabajo es importante, no hay que olvidar que uno de los objetivos últimos de los elementos de trabajo es la creación y obtención de informes que nos proporcionen datos fiables sobre el estado del proyecto. Todas las plantillas de TFS ya incluyen una serie de informes por defecto que podéis utilizar, pero es más que posible que algunos de ellos no proporcionen toda la información que necesitáis extraer, máxime si, como os sugerimos aquí, habéis personalizado previamente las plantillas de los proyectos.
Los informes de TFS residen en el repositorio de Reporting Services que se crea durante la instalación, y si tenéis Visual Studio ya tenéis todo lo necesario para editarlos. La definición de los informes puede descargarse mediante Visual Studio y modificarse en el propio entorno de desarrollo. Podéis realizar informes que partan del Data Warehouse de SQL Server Analysis Services o acceder directamente a las bases de datos, y en este caso lo más recomendable es que hagáis consultas a partir de las múltiples vistas ya existentes que proporcionan toda l a información relevante de forma fácil de entender. Los informes finalmente los cargareis en el mismo repositorio de Reporting Services y estarán disponibles para todos los miembros del equipo que tengan permiso para visualizarlos.
El otro punto importante de personalización es el portal de colaboración de SharePoint asociado al proyecto. No es obligatorio crearlo, pero es muy recomendable, y a medida que lo utilicéis hallaréis que sus características son versátiles y potentes. Podéis crear directorios de recursos asociados al proyecto, plantillas de documentos, calendarios, páginas de información general o de noticias… en fin, todas las características que posee SharePoint.
En conclusión: no os conforméis con lo que “sale de la caja”. TFS es mucho más que un simple gestor de versiones y sus capacidades de personalización os permitirán extraer de él un beneficio técnico y de negocio que descubriréis pronto y sin gran esfuerzo.